Yo no soy una barbie...

Yo no soy una barbie
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Yo no soy una Barbie, y por eso soy invisible.

Bueno, invisible no, invisible a medias.

A medias porque, cuando ellos quieren me escuchan y cuando no, simplemente me ignoran.

Porque, por ejemplo, si digo algo que apoya el machismo, a las grandes compañías, a los cerdos capitalistas que gobiernan el mundo, me van a escuchar.

Pero si grito contra una injusticia, si me rebelo contra los poderosos, si quiero mostrar que hay otro camino diferente al que nos enseñan quienes quieren destruirnos, me van a ignorar.

Por eso, soy invisible a medias, y no una Barbie.

Tampoco tengo el mejor cuerpo… Ni el cutis perfecto, ni pelo sin friz.

Pero se leer, y lo hago. Puedo pensar, y lo hago. Se expresar mis opiniones, y adivinen qué? Lo hago.

Y es por eso que no soy una Barbie, pero si soy invisible… A medias.

Y eso me molesta, mucho.

Porque las personas no tienen problema en fijarse en las lindas, en las de buen cuerpo, en las sexys. Si ella dice que dos más dos es cinco, todos lo van a creer, más allá de que llegue una medio invisible con una gran teoría demostrando que dos más dos es cuatro. Esta chica, esta mujer solo ganará burlas por parte de los demás, y muchísima humillación, o como peor destino, el ser brutalmente ignorada.

Pero, si la linda dice que no, que dos más dos da cuatro, nadie se va acordar ni de cuando la misma chica afirmó que dos más dos era cinco, ni de cuando humillaron a la medio invisible, a la chica que no es Barbie.

Eso nos lastima, de a poquito, nos lastima. Duele el saber que probablemente, en la mayoría de los casos, no nos hagan caso, dejándonos de lado, una, y otra, y otra vez más.

Pero hay que hacer el cambio, si señores. Hay que dejar de ser medio invisibles. Hay que mostrarle a la sociedad, que nosotras, las pensantes, existimos.

Mostrarles que no somos un mito.

Mostrarles que usar la cabeza también es sexy.

Mostrarles que, a veces, tener cerebro da muchos más puntos que un par de tetas y un buen trasero.

Mostrarles que tal vez, el modelo de mujer perfecta, es otro.

Que es el de las imperfectas mujeres cultas.

Hay que enseñarles.

Pero no yendo de una en una, no.

De a todas.

Salir todas a la calle, y todas gritar

‘¡ESTOY AQUÍ! ¡SÉ PENSAR Y ESTOY AQUÍ! ¡PUEDO EXPRESARME Y ESTOY AQUÍ! OIGAN TODOS, ¡SIGO AQUÍ!’

Y lentamente, pero finalmente, dejaremos de ser invisibles a medias.

Y un día, las muñecas que veremos en las vidrieras van a ser imperfectas, van a llevar libros gruesos o banderas de manifestaciones.

Van a venir juguetes que, si les tiras la cuerda, dirán ‘Me opongo a eso!’ o ‘No estoy de acuerdo con tu opinión’

Dejarán de ignorarnos, ¡Empezaremos a tomar papeles importantes!

Pero para eso, señoras, mujeres, señoritas, falta. Bastante.

Pero por algo se empieza, no? Con este escrito se empieza. Y se sigue.

Porque yo hoy dejo de ser invisible a medias.

Y sigo sin ser una Barbie.

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Espero te halla gustado mi escrito.. Si eres mujer, difúndelo! Y si no lo eres, También! Dejemos de contribuir al machismo que gobierna el mundo, marca un cambio! Ojalá te llegue mi mensaje... Saludos!

Cami :D